1. No comer suficiente
A veces pensamos que comiendo menos perderemos peso, pues esta idea es errada porque el cuerpo requiere las calorías necesarias para su correcto funcionamiento. Y si no las ingerimos el cuerpo entra en un estado de privación y falta de energía por lo que las calorías que ingeramos serán almacenados como depósitos de grasa para obtener energía.
Cuando ingerimos 2-3 comidas al día pasamos muchas horas entre una comida y otra y hacemos que el cuerpo entre en un estado de hambre, lo cual desacelera nuestro metabolismo porque disminuye la producción de la tiroides (t3 y t4) . Altos niveles de tiroides en el cuerpo aceleran el metabolismo, mientras que niveles bajos lo desaceleran llevándonos a la acumulación de grasa en el cuerpo.
2. Temerle a los carbohidratos
Los carbohidratos son fuente necesaria de energía para el cuerpo, toda dieta saludable debe incluirlos. Recordemos que no debemos privarnos de la comida, solo comer de manera inteligente y elegir los mejores alimentos para nuestro cuerpo.
Debemos elegir carbohidratos con bajo índice glicémico ( El índice glicémico determina la velocidad con que los carbohidratos se convierten en glucosa y entran al torrente sanguíneo).Los alimentos con bajo IG demoran más para entrar al torrente sanguíneo y los de alto IG demoran menos.
Los carbohidratos activan la secreción de insulina, mientras mas rápido entre un carbohidrato al torrente sanguíneo mayor es la secreción de insulina. (La insulina es una hormona anabólica responsable del crecimiento del tejido adiposo).
Es decir, mientras menor sea el IG de un alimento, menor será la secreción de insulina y disminuye la tendencia de que los carbohidratos sean convertidos en grasa.
También los alimentos con bajo IG han demostrado causar una sensación de saciedad después de la comida lo que evita los antojos de dulce entre comidas.
